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«Mi vida doy por estos colores»
- Updated: 3 junio, 2022
Seguimos conociendo el detrás de escena de nuestras instituciones locales. En este caso dialogamos con el flamante presidente del Club Olimpia, Rodrigo Martín, quien aporta sacrificio fuera del campo como dirigente, y dentro del mismo como jugador.
El basquetbolista posee un gran lazo sentimental con su institución, cimentada no sólo en la cantidad de años defendiendo sus colores, sino también por ser la pasión compartida con su madre, su hermano y su hijo, todos defensores dentro y fuera del campo de la camiseta de Olimpia.
Rodrigo, bienvenido al Rincón del Dirigente. ¿Cómo estás y cómo te encuentra este presente?
Muchas gracias. Gracias a Dios pudimos hacernos cargo del club. Logramos juntarnos, por amor a Olimpia básicamente, distintas personas que están muy ligadas desde siempre. Yo desde los 5 años estoy en el club, y hoy me toca ser el presidente de la Comisión. Hemos proyectado levantar al club.
¿Ser presidente fue algo buscado por vos, o se dio naturalmente con el tiempo?
Lo estuvimos charlando muchas veces. Soy muy allegado a Tato, el anterior presidente. Nos agarró la pandemia, nos golpeó muy fuerte y el club se vino a pique. Ahí empezamos a charlar entre algunos conocidos que nos gusta el club y nos pusimos de acuerdo. Formamos la nueva Comisión Directiva, y hace no más de 2 meses estamos en este proyecto.
¿Con qué club te encontraste cuando te dieron las llaves y empezaron con el proyecto?
Nos encontramos con algunas poquitas falencias. No teníamos todas las categorías. De repente en inferiores estamos bastante flojos, por eso seleccionamos a un entrenador joven para los más chiquititos, Joaco Robert, y para los más grandes sumamos a Toti Valverde y Pablo Gavasci. Estamos proyectando tener todas las categorías completas y en un nivel competitivo.
Por otro lado, el año pasado a nosotros nos sobraban jugadores y decidimos hacer dos equipos superiores, A y B, lo cual nos llenó de satisfacción. Al principio lo largamos para que nadie se quedara sin jugar, y al final del torneo logramos los dos ascensos. Fue una sorpresa muy linda. Habíamos pensado en que íbamos a hacer si ascendían los dos, pero estaba muy lejano a la realidad.
Debe ser muy difícil captar chicos en una zona geográfica con varias opciones cercanas compitiendo entre sí…
Exactamente. Estamos muy cerca de Godoy Cruz, Banco Mendoza, Obras y Andes Talleres. Lamentablemente al no tener otro deporte en el club, no tenés más cantidad de chicos para sostener. Vamos a hacer una gestión importante para sumar chicos de las escuelas de la zona, y así volver a ser lo que fuimos en nuestro mejor momento, cuando éramos por arriba de 150 jugadores en el club.
¿Cuál es el fuerte que tiene Olimpia para seducir a cualquier chico que quiere empezar a entrenar?
Hoy el club está en un reinicio de todas sus categorías. Tenemos cercanía de colectivos de todas partes de Mendoza, y queremos sumar gente de todas las edades. Es un club de barrio, con mucho carisma y en el que estamos metidos de lleno para darles todas las comodidades a los deportistas. No tenemos muchas ayudas económicas, pero hacemos todo a pulmón.
Para quienes se quieran sumar, de Mosquitos a U13 se entrena lunes, miércoles y viernes de 17hs a 19hs, si es U15 martes, miércoles y viernes desde las 20 horas hasta las 21 30 horas, y si es U19, lunes y viernes de 20hs a 21hs. Acercarse siempre por la secretaría del club, Figueroa Alcorta 60 de Godoy Cruz.
¿De dónde sale el dinero y cómo hacen para sostener económicamente al club?
Hicimos una gran pollada, participaron todos los socios y papás que tenemos. Nos fue muy bien. El mayor aporte sale de las cuotas deportivas de los jugadores, los socios del club. Y después todo privado, a través de la gestión de los integrantes de la Comisión. Quiero agradecer a todas las personas que colaboran a diario, que están presentes. Comisión, jugadores y padres. Los que puedan sumar a este proyecto, son bienvenidos.
¿Cómo ves el presente de los equipos en Nivel 1?
Por un lado tenemos mucho optimismo y confianza con el Olimpia B. estamos peleando la zona campeonato, y le hemos dado todo el apoyo. Con el otro equipo estamos luchando por el descenso, y tratamos de inyectarles anímicamente lo mejor porque es una situación en la que a nadie le gusta estar. Tenemos diferencias por jugadores que tenemos lesionados y no obtener buenos resultados.
¿Cómo es tener a dos equipos en la misma categoría, compitiendo entre sí?
Es muy raro, porque no estábamos proyectando eso. No queríamos tener dos equipos fuertes en la misma categoría, pero no le soltamos la mano a ninguno de los dos para no dejar jugadores libres. Es muy raro porque uno está en la mejor parte del torneo y el otro en la peor. Pero son situaciones que pasan, y hay que ponerle el pecho.
¿Cómo ves el nivel del básquet de la provincia?
Veo mucho crecimiento. Fuimos a ver muchos partidos de Superliga y también de Nivel 1, y el nivel de juego es alto. Eso está bueno, porque mientras mayor nivel tengamos en Mendoza, va a ser mejor para todos.
¿Cuál es el techo de Olimpia en el mediano plazo?
Es meternos máximo en semis de playoffs. La Superliga es un sueño y me encantaría jugarla, pero hay que ser realistas y saber que no contamos con las necesidades para jugar ahí. Estamos trabajando para lograr el piso de parqué y cambiar la iluminación. Cuando lo logremos, pensaremos en la máxima categoría. Hay que ser realistas, coherentes y no armar un castillo en la arena. No podemos soñar por ahora con un ascenso.
¿Cómo es esto de ser jugador y dirigente al mismo tiempo?
Se siente muy raro, lo venía viviendo el torneo pasado como colaborador. Cuando ascendimos me puse eso como techo deportivo. Me lo tomé de otra manera, y como los jugadores somos todos amigos, quedamos de acuerdo en jugar en el Nivel 1 y después meternos de lleno en la dirigencia. Se siente raro porque son cargos que no son compatibles. Pero hay que poner el pecho, todo por Olimpia. Mi vida doy por estos colores. Tengo 40 años, desde los 5 estoy en la institución. Es decir, llevo 35 años en el club.
Si no fueses presidente, ¿Igual hubieses dado un paso al costado?
Por cómo me siento hoy y todo lo que estoy pasando a nivel personal, quizás me llegó el momento a darle prioridad a diferentes objetivos de la vida. Pero nunca me van a sacar las ganas de jugar al básquet. Lo seguiré haciendo de otra manera, en otro equipo. Lo veré en su momento.
