MATIAS SANDES: «Me quedé en Macabi por la calidad de la gente»

Por Prensa Federación
- Tweet
- Pin It
Updated: 16 mayo, 2024

Uno de los mejores, sino el mejor jugador que ha brindado la provincia de Mendoza, Carlos Matías Sandes, charló con nosotros acerca de su presente como jugador y entrenador de Israelita Macabi. Se tocaron temas tanto de su vida deportiva como su vida personal, donde, por ejemplo, destacó la posibilidad de compartir cancha con su hijo mayor, Tomás. ¿Cómo es el día a día de un jugador que disputó 17 temporadas en la élite del básquet nacional? Todo esto se dio en el tiempo que nos prestó Matías para entrevistarlo.

El histórico Matías, a principio de año recibió numerosas ofertas para disputar el Torneo Apertura aquí en Mendoza, sin embargo, él decidió quedarse en Macabi (donde había jugado el Torneo Clausura 2023) y sobre esto decía:

“Me quedé en Macabi por la calidad de la gente. Desde que estuve me trataron de primera e incluso más. A nivel competitivo es uno de los cinco mejores clubes de la provincia. Todo esto acompañado de una gran estructura, es un club muy bien organizado y eso a mi me seduce mucho. Entonces, se dieron todos esos factores. Macabi es un club ejemplar.”

Matías se fue con apenas 14 años de Murialdo para probar suerte en Boca. En el Xeneixe brilló, se alzó con su primer título de Liga Nacional en la temporada 2003-04´. Consiguió dos campeonatos sudamericanos en 2004 y 2005. Además, por si fuera poco, en lo personal fue nombrado en el mejor quinteto de la Liga 2004-05´ y dos veces mejor sexto hombre en la temporada 2003-04´ y 2004-05´. Su éxito en el equipo de La Ribera hizo que pegara el salto a Europa y por esos años estuvo hasta cerca de pisar la NBA. Luego regresó al país y jugó 10 años más ininterrumpidamente en la Liga Nacional, donde logró dos Ligas Nacionales con San Lorenzo y fue campeón de la Liga de las Américas (máximo certamen a nivel continental). Sin dudas, un currículum que a muchos les gustaría tener. Pero ahora, después de todos aquellos logros, la vida de Mati pasa por otro lado. Esto nos contaba de su presente deportivo:

“Estoy en una etapa de disfrutar un poco más el juego. No tengo presiones ni obligaciones, que si bien las tengo, están en menor medida. Esto me permite hacer otras cosas durante la semana, disfrutar los entrenamientos y otras cosas que quizás antes no podía. No porque esté relajado ni mucho menos, pero me lo tomo de otra manera.”

Para Matías siempre fue un sueño compartir el parquet con su hijo y este año lo pudo cumplir. Ahora, Mati disfruta de jugar con su hijo mayor, Tomás (jugador categoría 2009), donde comparten el día a día de ser parte del mismo plantel.

“Es algo que hablábamos desde que Tomi era muy chiquito, yo le decía que no me iba retirar hasta que no juguemos juntos. Ahora tengo la presión del más chiquito (Agustín), ¡ja! La tiene más difícil, más por mi que por él. Pero es una sensación rara, porque estamos jugando y me dice papá. Hay veces que estoy más pendiente de lo que hace el de lo que hago yo dentro de la cancha. Pero la verdad que no todos pueden decir que jugaron con su hijo en el mismo equipo, para mí es un orgullo y estoy muy contento con eso. Y no solo jugar, sino lo que es compartir un vestuario, un entrenamiento y todo lo que conlleva jugar en el mismo equipo.”

Matías Sandes compartiendo cancha con su hijo Tomás.

Si bien Matías ha tenido experiencias enseñando, como en la Escuela de Formación de la FBPM junto con Carlina Sánchez y Alejandro Benito, en este 2024, por primera vez en su carrera como jugador, ha comenzado a incursionar en la tarea de la dirección técnica. A partir de este año, se ha hecho cargo de las categorías U15 y U17 de Macabi. Sobre su nueva etapa, esto comentaba:

“Es más difícil de lo que parece. Por más que haya estado toda mi vida adulta en este deporte, te das cuenta que siempre hay muchísimo por aprender. Soy un novato que estoy aprendiendo todos los días. Siempre lo dije, como jugador nunca se me escapa ningún detalle, como entrenador se me escapa todo. Suerte que tengo a Luciano y nos vamos ayudando mutuamente, vamos aprendiendo los dos. Estoy muy contento donde estoy (Macabi) porque te permite trabajar y hacer las cosas bien.”

El básquet de manera profesional parece ir quedando atrás poco a poco, y su estadía en Mendoza parece casi definitiva. En cuanto a esto, surgió la pregunta de algún posible futuro proyecto y esto contestó Matías:

“No tengo ningún proyecto a largo plazo. El primer paso es instalarme bien en Mendoza. Todavía no termino de acostumbrarme que ya estoy viviendo acá en la provincia. Todavía no estoy acostumbrado a vivir en lugar fijo. De a poco estoy cambiando el chip”.

El ex Boca fue contundente ante la pregunta si volvería a salir de la provincia a jugar de manera profesional:

“No, es casi imposible que vuelva a jugar fuera de la provincia. Sería una excepción muy grande”

Aquel Matías que abocaba el cien por ciento de su vida al deporte ya casi no existe, han ido creciendo diferentes prioridades. ¿Qué diferencia al Matías de hace 15 años con el de ahora?

“Es una persona totalmente diferente. Mi vida y la de mi familia giraba en torno al básquet. En los días de partido había una rutina en casa de horarios, descanso, alimentación. Hoy, si bien lo sigo haciendo, no es lo primordial. La dinámica familiar cambia un montón.”

Lamentablemente, los deportistas tienen fecha de caducidad, y el básquet de Mendoza teme a escuchar la noticia que nadie quiere escuchar. Pero ¿Hasta cuándo podremos disfrutar de Matías Sandes?

“Vamos temporada tras temporada, de a poquito. Tomando decisiones cada un tiempo. De acá a dos años, la verdad que no sé, así que vamos de a poco.”

No nos olvidemos de que Matías integra el plantel de Primera División del Club Israelita Macabi, actualmente disputando Nivel Uno, la segunda categoría del básquet de Mendoza. El equipo de calle España es el principal candidato al ascenso a la Superliga y Matías habló del presente del Celeste:

“Es un poco lo que se ve de afuera. Yo creo basquetbolísticamente nos falta mucho trabajo. Creo que este torneo estamos muy bien, hay ventaja contra otros equipos, pero en este deporte loco sabes lo que significa una mala noche, un mal entrenamiento previo, hay diversos factores que pueden llegar a determinar un resultado, pero lo veo bien. El objetivo del club es ascender y se logra creo que va a cambiar nuestro juego.”

Por último, cerró opinando acerca de Macabi como institución y en el momento que se encuentra el club:

“En el club se trabaja muy bien. De momento los chicos van aprendiendo más allá de los resultados. Desde el minibásquet hasta U19 se ve la evolución de los chicos, eso es lo importante. Con Nacho, Lucho, Rubén de las inferiores, tenemos la misma línea de trabajo, entonces si un chico U13 puede jugar sin ningún problema en U15. Estoy muy contento por el buen grupo de trabajo que se ha armado.”