En una noche que quedará grabada en la historia del básquet mendocino, Rodrigo Funes convirtió 12 triples en un solo partido, superando el récord provincial y dejando una marca imborrable.
La última jornada de la fase regular de la Superliga Mendocina fue testigo de una actuación descomunal. Con precisión quirúrgica, el alero de la U. D. San José, fue encendiendo al público y a sus compañeros, hasta alcanzar una cifra que superó a Jeremías Bustos, Stéfano Arancibia, Mitch Marmelstein y Marcelo Martín, todos con un récord de 11 triples convertidos.
“Nunca me di cuenta hasta el último cuarto, cuando uno de mis compañeros me avisó. Nunca estuve pensando en lo que podía pasar. Fue totalmente natural, nunca se me pasó por la cabeza llegar al récord y mucho menos pasarlo. Se dio todo así”, dijo el alero.
Consultado sobre cuánto se entrena el tiro de tres, Chori fue claro: “El tiro se entrena todos los días, es un hábito. Ya son varios años jugando a este hermoso deporte y constantemente uno entrena los tiros. La confianza lo es todo”.
Si su trayectoria, sus títulos y su forma de jugar ya lo ubicaban como un jugador emblemático de nuestra provincia, este logro lo engrandece aún más. La marca alcanzada lo consolida como uno de los máximos referentes del básquet mendocino, por rendimiento, constancia y legado.
El récord no solo enaltece a Chori, sino que también deja en alto el nombre de la Unión Deportiva San José, que sigue formando protagonistas de alto vuelo. Una noche inolvidable que quedará en la memoria de todos los que aman este deporte.
