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«Apostamos a las formativas»

Continuamos recorriendo instituciones con el Rincón del Dirigente, donde conocemos el detrás de escena de los clubes de nuestra provincia. Hoy toca el turno de General San Martín, uno de los históricos de Mendoza. Allí hablamos con el dirigente Augusto Carignano.

Bienvenido, Augusto. ¿Cómo estás?

Muy bien. Pensando en el club como siempre, para seguir creciendo.

Viene siendo un 2022 muy movido en cantidad de partidos, ¿Cuál es el balance que hacés, hasta el momento, en el club?

A nivel federativo se han organizado muchísimos partidos en ambas ramas y en todas las categorías. Lo que ha generado una mayor competencia, y una mayor exigencia por parte de los dirigentes de los clubes en la organización de la logística que esto implica.

En el club es un año de transición, donde apostamos a las categorías formativas. Reforzamos el cuerpo técnico de inferiores, incorporando a Lucas Pedemonte, dos asistentes y a una psicóloga deportiva. Después de tres años logramos ascender. Hay un grupo lindo de gente trabajando, muchos papás y mamás que están siempre al pie del cañón para lo que haga falta: taquilla, hacer sorteos, camisetas o pelotas, coordinación de cancha y arbitraje, todo. Asique enchufados.

¿El objetivo es nutrir a la primera de más jugadores de la casa?

Exactamente. Afortunadamente tenemos alrededor de 170 chicos en formativas, y un crecimiento grande en el femenino gracias al trabajo de Paula Ramos y las chicas que la rodean.

A nivel masculino hemos apostado a un recambio generacional, donde ya tenemos tres jugadores que en 2019 comenzaron a tener minutos en primera y que hoy ya son jugadores destacados, como Exequiel Blanco, Ignacio Legallais, y Agustín Torres, que están afianzados. Repatriamos a Ignacio Díaz, y estamos dándole minutos a chicos de U15, U17 y U19, para que vayan haciendo sus primeras armas, aprendiendo, y fortaleciéndose para qué en unos años, junto con los chicos que vienen empujando de abajo, podamos tener un plantel competitivo con jugadores del club como se ha caracterizado siempre General San Martín.

En el femenino han tenido una primera parte del año muy positiva…

Si, hubo unos altercados al principio con la comisión, pero las chicas se quedaron y pudieron sobrellevar esto. Nosotros en el masculino siempre colaboramos para que ellas puedan desarrollarse. Coordinamos la utilización de cancha y tratamos de trabajar en conjunto. De hecho, antes de arrancar el Clausura se cambió de entrenador, y ante la consulta de sumarlo a Lucas Pedemonte al femenino, dimos el okay inmediatamente. Entendemos que trabajar al unísono es la forma de crecer, y más con el esfuerzo que hicieron las chicas al llegar a la final en el primer semestre, algo totalmente meritorio.

A futuro, ¿Cuáles son los proyectos que poseen?

El sábado 29 de octubre a las 16 30 horas hay una asamblea en el club, donde me presento como candidato a Presidente junto con un grupo grande de socios y socias de todas las actividades, que quieren un cambio para el club después de 13 años y una conducción que hizo mucho pero que cumplió un ciclo. Venimos con ideas y proyectos interesantes para lograr un saltito de calidad, hacer crecer al club, fidelizar los socios que tenemos, y mejorar la infraestructura. Es un compromiso grande de nuestra parte.

Invitamos a todos los socios de Pacífico, y a aquellos que alguna vez estuvieron en el club, a que nos apoyen el 29 de octubre en las elecciones.

A nivel federativo, ¿Qué cargo ocupás y como ves al básquet de Mendoza?

En la federación, desde que asumimos la conducción en marzo del 2021, cumplo con el cargo de Secretario de Actas. También me tocó organizar el Tribunal de Disciplina, que siempre es un lugar álgido porque se dividen aguas. Se falla a favor de uno, y el que no le toca ganar queda siempre un poco a disgusto. Tratamos de ser lo más objetivos posible. Trasparentamos esto publicando todos los fallos, llevando estadísticas de todo, y con un Tribunal de tres miembros que trabajan a través de sorteo, y en forma conjunta en los casos más complicados.

En lo organizativo, hemos dado un salto en estos últimos dos años. En cuanto a cantidad de partidos, a los torneos que organizamos, a la claridad con la que se disputan (como la programación, que le permite a cada institución planificar seriamente).

Otra de las cosas que mejoró la Federación es la comunicación y el manejo de redes sociales, sumamente importante. También quiero destacar la labor, por las sombras muchas veces, de Daniel Quintana. Un gran dirigente y una gran persona que trabaja por el bien del básquet de Mendoza de manera desinteresada.

Ni hablar del crecimiento en jugadores y competencia, eso es muy interesante. Una de las cosas que propusimos antes de asumir, y que logramos con creces, fue desarrollar el básquet femenino. Siempre tuvimos buenas jugadoras, y equipos. Logramos ese crecimiento y la incorporación de más equipos a primera división, como Atenas y San José. Mas el gran desarrollo de instituciones que ya estaban, como Junín y Rivadavia.

Ha sido clave la Escuela de Formación Femenina, proyecto que encaramos con Ale Brito, Carolina Sánchez, y Matías Sandez el año pasado, y que pudimos sostenerlo en el tiempo, potenciando la infraestructura y mejorando materiales.

La última y continuando con la costumbre del Rincón del Dirigente, queremos conocer cómo y porqué te iniciaste en la dirigencia deportiva.

Desde que soy adolescente, en mi escritorio donde estudiaba hacía anotaciones en un cuadernito sobre lo que quería para mi club en infraestructura. Imaginaba cancha de parquet, tribunas, camarines nuevos y todo eso. Lo pude empezar a llevar a cabo en el 2014, cuando el Coordinador Deportivo del club me llamó junto a Germán Sánchez. Después se nos sumó Enzo Calderón, y mi hermano. Empezamos a trabajar, y encontré algo que me apasionaba y me sacaba el sueño. Empezamos con proyectitos, y así logramos aumentar el número de jugadores, apostamos a una categoría para desarrollarla fuertemente, donde estaban esos tres chicos que hoy llegaron a primera.

Fue un camino de ida, apasionante, y más tratándose del club donde crecí, y donde está jugando mi hija.

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