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«Este plantel representa la idea dentro y fuera de la cancha»

Dialogamos con Matías Contreras, el entrenador de U15 Femenino de Maipú, flamante campeón de la Liga Federal Formativa U15.

Después de un torneo en el que mostraron un nivel superlativo, la Municipalidad de Maipú se adueñó de la Liga Federal Formativa U15, en un apasionante cuadrangular final en Concepción del Uruguay.

El conductor de la máquina que viene siendo aceitada hace mucho tiempo a fuerza de trabajo serio, y a largo plazo, es Matías Contreras. El DT, charló en exclusiva con la Federación para contar todos los detalles de una estrella más para un equipo con un presente bárbaro, y un futuro sin techo a la vista.

Hola Matías, ¿Cómo estás?

Bien, todo bien. La verdad que habiendo vivido una experiencia hermosa, que da mucha satisfacción y alegría, y deja muchas enseñanzas. Eso es lo más lindo de todo.

Fue un torneo muy duro, con rivales de jerarquía, pero lo dominaron de punta a punta.

Si, Maipú viene trabajando hace rato con esto. A mí me tocó sumarme este año. Fue un torneo muy duro, en el cual cada rival fue enseñándonos y haciéndonos crecer.

En esta última fase, con tantos kilómetros de viaje a Concepción del Uruguay más el calor y la humedad, el grupo se fortaleció. Fue una experiencia muy linda en todos los sentidos, por suerte llegamos en el mejor nivel deportivo.

¿Fue redondito el desarrollo? ¿Salió todo como esperaban o hubo que adaptarse al ritmo de la competencia?

En la primera fase nos tocó Rivadavia, un rival conocido con el que sabíamos cómo podíamos enfrentarlo. A medida de ir pasando de fase íbamos estudiando el rival y siempre tuve la misma sensación, de que dependía de las chicas nuestras. Veía a los demás planteles, y ninguno tenía la intensidad defensiva de nuestras chicas y la cantidad de recursos en ofensiva.

Veía que había grandes individualidades en los otros planteles, y que dependían mucho de ellas, algo que no nos pasaba a nosotros. Si podíamos imprimir nuestra intensidad defensiva y jugar colectivamente en ataque, nos iba a salir bien. Por suerte fue así. El primer partido con Paracao la individualidad de ellas promediaba 20 puntos, y logramos bajarla a 4.

En la final mantuvieron la intensidad defensiva y nunca se nublaron al tener el campeonato al alcance de la mano, eso tiene mucho mérito.

Me ha tocado trabajar con muchos planteles, viví muchas experiencias, pero ver a chicas de 14 años con tanta madurez para manejar el partido y sus tiempos, no deja de sorprenderlo a uno.

Son pibas muy jóvenes. Yo dirijo al masculino y lucho contra la inmadurez propia de la edad, pero en ellas no lo vi. Recuperábamos y, con la ventaja a favor, frenaban la pelota. Jugaron a lo que debían en cada momento. Incorporaron la idea de juego, y mostraron madurez en tomar decisiones, eso es para destacar.

La experiencia previa en esta clase de desafíos, tanto en Maipú como en la Selección de Mendoza, ayudó a que lleguen con un roce muy importante.

Si, ni hablar. Algunas fueron campeonas como juveniles con U17 en Concepción del Uruguay, también campeonas del Argentino del año pasado, y la mitad del plantel actual este año disputó la final de Liga Federal Formativa U17 con Obras. Además, salieron campeonas de los Juego Evita de manera invicta, y ahora en esta final.

Tienen un roce que se nota a la hora de jugar, no les pesa tomar decisiones. Cuando se equivocan, tienen la constancia de seguir incluso mejor.

¿Cuánto ayuda al básquet de Mendoza el trabajo de Maipú?

Puede ser un espejo. Ojalá sea así. El básquet femenino ha sido una lucha eterna. Hace más de 10 años tuve la suerte de trabajar en Petroleros YPF, otro club modelo en formativas y primera de ese momento. Ahora que volví de Santa Fé, la lucha es la misma. Está polarizada en los clubes que trabajan bien, y se nota mucho. Después hay otros a los que les cuesta mucho porque el masculino acapara más, o porque el femenino está en desarrollo.

Ojalá sirva para saber que, trabajando con constancia como lo hace Maipú y saliendo a competir a nivel nacional, se pueden lograr muchas cosas.

En lo personal, ¿Qué significó ser campeón nacional?

Enriquecedor. Trato de aprender siempre, en las victorias y en las derrotas. Y esta es una enseñanza más, una muy grande.

En lo personal no pasé un buen año por situaciones familiares de salud, y ha sido un alivio y un descanso a todo eso poder trabajar como me gusta, y sentir la identificación de las chicas, que como entrenador es lo más lindo que te puede pasar.

Este plantel representa la idea dentro y fuera de la cancha. Nos han destacado el comportamiento de las chicas en cualquier lugar que fuimos. Siempre nos recibieron de la mejor manera y nos fuimos recibiendo agradecimientos por el respeto y los valores que las chicas transmitían. Eso como entrenador te hace feliz, porque podés seguir aprendiendo y creciendo. Estar en el más alto nivel nacional te obliga a estar con todas las luces, y bien atento, y eso lo pudimos hacer.

Gracias Matías. Felicitaciones, y el cierre queda a tu cargo.

Gracias. El básquet de Mendoza tiene que seguir apostando por esto, salir al país a ganar roce y vivir la experiencia de distintas situaciones. Más allá del resultado. Así los jugadores del básquet local pueden seguir creciendo.

 

 

Fotos: Prensa CAB

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